Por una bandera
30/09/2017 En mi clase somos 60 personas y menos de 20 son madrileños. Somos dos gallegos, dos asturianas, un navarro, una catalana, una balear, un murciano, tres o cuatro castellanos y un montón de extremeños, castellano-manchegos, andaluces y canarios. En los acentos de la clase se nota que los del norte somos minoría. El jueves por la tarde volví a Somosaguas después de comer, a pesar de que solo tengo clase por las mañanas. En el hall de la facultad de Políticas y Sociología tenía lugar la primera asamblea del curso del Frente de Estudiantes, un sindicato estudiantil sobre el que había leído antes de venir. En la parada de bus me encontré con Paloma, que tiene clase por la tarde, y al escuchar a dónde iba, me dijo: -Pues ya verás cómo es mi facultad, vas a flipar. -Paloma, que también es mi facultad. Las dos nos reímos, prometimos quedar pronto y cada una siguió su camino. En la asamblea, los miembros del Frente de Estudiantes hablaron de su proyecto de defensa d